Música: "Working Class Hero" - John Lennon.
Aquel día se dió la mayor cantidad de endorfinas en sangre jamás conocida (so far). Releyendo y reflexionando sobre efervescencias, descargas eléctricas, momentos fugaces que se funden entre dos precipicios antes de caer al abismo y desaparecer. En el abismo hay un tapiz de hielo, una fina y misteriosa capa que se mantiene a pesar de que bajo ella el agua hierve y no sabe si derretirlo y hacerlo desaparecer. Trazos azules por los brazos, el cuello, las manos que parecen estallar solo por caer al abismo. Los sigo. Y no hay mucho que pueda hacer por rescatarlo y volver a ver fluir la adrenalina de la poción mágica, de la real. Tal vez otra, tal vez pronto. Si es otra habrá que arriesgarse de nuevo a que haya cadenas, a evitarlas, a investigar las intenciones y desaparecer si aparecen candados o sogas sin que nadie salga herido. Por el momento queda el sucedáneo, siempre quedará. Sentidos algo ¿distorsionados?. Rebajas del 50%. Diez sentidos sincronizados nunca se podrán comparar aunque horas después (o incluso segundos) el efecto sea mas o menos el mismo y, más importante aún que eso, la libertad es la misma. ¿Se echa en falta la sincronización de sentidos (que no sentimientos) o la libertad que produce encontrarla y vivirla sin esperar ni pedir nada a cambio?.
"I wanna heal, I wanna feel like I’m close to something real I wanna find something I’ve wanted all along somewhere I belong" - "Somewhere I Belong", Linkin Park.
PD: [I] Do Not [want you to] Disturb [me now]. Y lo demás tonterías.
viernes, julio 22, 2005
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1 comentario:
Well, that could be true.
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